SIMOF.

SIMOF: 10 nombres de diseñador para no olvidar

¡Hola, hola!

Perdón por mi ausencia, pero enero ha sido sinónimo de mucho trabajo. Todo para bien: he estado organizando un evento empresarial, que se celebró a primeros de febrero, y, además, he vuelto a formar parte del equipo de comunicación del Salón Internacional de la Moda Flamenca (SIMOF). Como en 2019, mi socia y yo (con nuestra agencia), hemos estado al cargo de su cuenta oficial de Instagram, junto a Inmaculada Delgado. Y como hemos visto mucha moda flamenca, repasemos SIMOF: 10 nombres de diseñador para no olvidar.

Una apreciación, que no quiero malas interpretaciones. NO estoy diciendo que el trabajo de todos las firmas y diseñadores que se han subido a la pasarela no sea más que bueno. Ha habido 43 desfiles profesionales (aparte de los que se han desarrollado en SIMOF EGO; plataforma para nuevos creadores), lo que significa ¡más de 1.700 trajes!  Pero me voy a centrar en 10 diseñadores, por lo que me ha gustado de su trabajo.

Alejandro Santizo. Su uso del rojo cautiva, sólo hay que contemplar el bodegón que os dejo por aquí para comprenderlo.

Alonso Cozar. La unión de tradición y tendencias. Lunares de siempre, formas clásicas, pero con mangas abullonadas, botones dorados… Bonita mezcla.

Ana Morón. El universo que esta diseñadora crea es maravilloso. Su manera de trabajar hombros, mangas, vuelos… Y el uso que hace del color me fascina.

Antonio Gutérrez. Su forma de entender la moda flamenca engancha. Y el espectáculo que envuelve la presentación de cada colección, también.

Cristo Báñez. Era uno de los desfiles más esperados. Me quedo con todos sus diseños en negro: flecos, transparencias…

Gil Ortiz. No hay que dejar de tenerlo presente. Me gusta la unión que realiza de lo tradicional, con tendencias e innovación.

Javier García. Su mezcla de blanco y negro, o cómo usa el gris (hasta hace unos años, nada común en moda flamenca) son aspectos que me llaman muchísimo la atención.

José Galvañ. El amor que siente por el flamenco (es bailaor profesional) se nota en cada una de sus colecciones. Su interpretación de la moda flamenca me encanta.

Luis Fernández. Sus colecciones van superándose una tras otra. Es elegante, sensual… Pura belleza.

Rosa Pedroche. Sus estampados, sus faldas con volumen, sus detalles en la espalda… Me ha vuelto a conquistar.

¡Hasta pronto!

Fotografías: Chema Soler

V&L.

Homenaje de Victorio & Lucchino al traje de flamenca

Llevo unas semanas muy callado. Sorry. Febrero ha pasado volando. Entre que tiene menos días que otros meses, que el tiempo va a la velocidad de la luz y que en mi agencia (A Question of Retail) no hemos parado… Comenzamos haciéndonos cargos de la cuenta oficial de Instagram del 25 aniversario de SIMOF, y, de la mano también de la Agencia Doble Erre, seguimos gestionando la comunicación de la primera edición de OLÉ, OLÁ SIMOF o la presentación del homenaje de Victorio & Lucchino al traje de flamenca y los 25 años de SIMOF.

Los diseñadores han creado una colección cápsula (‘Por las calles de mi Sevilla’) para rendir homenaje a los 25 años del Salón Internacional de la Moda Flamenca y al traje de gitana o traje de flamenca (nada de faralaes guapis, a ver si ya, de una vez, lo captamos…), el único vivo y en constante cambio.

Eso sí, fieles a su estilo, han querido aportar vanguardia a los 8 trajes que la componen. ¿Cómo? En forma de patronaje, así como con el uso de nuevas tecnologías (corte al láser) y texturas. No obstante, siguen la senda que ya iniciaron en su momento y optan por diseños entallados y con mucho volumen, el mismo que siempre han impregnado sus colecciones prêt-à-porter.

 

Su impronta se nota y mucho. Han trabajo nuevas formas de mangas y han jugado con el volante. De hecho, la colección está repleta de volantes, pero de volantes que no parecen tal, a modo de capa, superpuestos…

Colores lisos

Victorio & Lucchino han optado por organza, tafetán, raso, satén, licra con lunar flocado de terciopelo, popelín o perforados para estos vestidos, confeccionados en su totalidad con tejidos de Flamentex. Y por colores lisos: negro, blanco, azul, verde, buganvilla, granate, coral o teja. En estampados, solo el clásico lunar.

Para completar sus looks, cero mantoncillos, piezas de joyería de diseño propio, de tipo filigrana cordobesa (plata y coral) o prêt-a-porter (cristal natural, piedras semipreciosas o cristal de Swarovski); y claveles en el cabello, originarios de Persia (Irán), pero con gran vinculación con España desde el siglo XVI.

La presentación no podía ser en otro lugar que en un espacio donde el duende flamenco está más que presente: el mítico tablao flamenco Los Gallos, un espacio con 50 años de historia, el más antiguo de Sevilla y considerado uno de los de mayor reconocimiento y prestigio a nivel internacional.

¡Hasta pronto!

Fotografías: Chema Soler

Lina.

Un ‘Río de Rosas’, amor y pureza by Lina1960

En la Sevilla del siglo XVI, ahora en boga por la serie La Peste, se puso muy de moda un dicho: «Quien no ha visto Sevilla, no ha visto maravilla». Pues quien no conoce Lina1960, tampoco la ha visto. Un Río de Rosas, la nueva colección de la decana y maestra en la moda flamenca, habla de amor, pureza, respeto y admiración al traje de flamenca, la artesanía y el buen hacer.

Las rosas, esa flor que es sentimiento, belleza, sensualidad, armonía, paz y alegría, y en forma de color, una de las señas de identidad de la firma; y el río, tan importante en Sevilla (Guadalquivir), símbolo de vida, comunicación e historia, inauguraron la pasarela del XXIV Salón Internacional de Moda Flamenca (Simof 2018).

Rocío y Mila Montero siguen el camino que marcaron sus padres (Francisco Montero y Lina Fernández): mimar cada detalle y apostar por la artesanía, por lo hecho a mano con pasión, delicadeza y dedicación.

Río de Rosas son 37 creaciones, divididas en dos partes: Lina Esencial, patrones y formas clásicas de la casa; y Lina Colección, tendencias y vanguardia. Por eso, hay trajes de una pieza y conjuntos de blusas de gasa, brocadas o perforadas, con encajes y flores bordadas (muy versátiles, para vestir en infinidad de ocasiones) y faldas de talle alto.

Hay escotes a la caja o en pico; mangas en forma de flor, al codo, abullonadas y rematadas con organdí, como sus enaguas (marca de la casa), adornadas con pasacintas, tiras bordadas o encaje de bolillo para aportar vuelo y prestancia. En Río de Rosas, los volantes son pequeños, medianos o maxi (asimétricos, fruncidos y tableados); hay vestidos lisos y creaciones, en los que es fundamental la mezcla de estampados, con colores lisos y lunares.

Popelín, seda, bastista…

En cuanto a tejidos (muchos, creados en exclusiva para la firma), destacan algodón, popelín, seda, batista perforada, crespón, brocado, gasas, organza, tafetán y raso de algodón. Mientras, la paleta de color va desde los clásicos rojo, blanco y negro al rosa (del palo al salmón), azul (en diferentes vertientes), verde, burdeos o beige.

En las colecciones de Lina1960 nunca faltan los mantones confeccionados a mano (lisos o bordados), que este año incorporan lazos bordados en dos colores a sus flores; cinturones y fajines, de raso o bordados en seda y acabados en lazos con madroños: ni unos buenos pendientes, en este caso aros metálicos con rosas, firmados por Benjamín Bulnes.

Fotos: Cien x Cien Estudio (campaña) / Chema Soler (desfile)

¡Hasta pronto!